Las Pirámides
Desde tiempos antiguos hasta hoy, las pirámides (en especial la Gran Pirámide de Gizeh) son motivo de una controversia centrada en la posibilidad de que estas misteriosas estructuras geométricas contengan en su interior los secretos del universo. Y su distribución por toda la Tierra (desde Egipto a México, pasando por Camboya o Siberia) hace sospechar que su finalidad no era únicamente convertirse en monumentos funerarios, sino que muy bien podían servir a propósitos mucho más complejos y misteriosos.
Se ha descubierto, con pruebas fehacientes el poder de la pirámide en distintas funciones de la vida cotidiana: incremento del vigor sexual, conservación de alimentos, poder terapéutico, equilibrio en el campo energético, entre otras muchas más.
OBSIDIANA:
Así como la piedra lapislázuli es la de la comunicación, la obsidiana es la piedra de la protección. Es decir, una de las propiedades más destacables de esta piedra espiritual es la protectora: no solamente protege frente al mal de ojo, sino que también sustituye energías negativas y estrés por bienestar y serenidad. Además, elimina tensiones y modera posibles comportamientos violentos.
En ocasiones las malas vibras no vienen del exterior: somos nosotros mismos quienes nos ponemos la zancadilla. Por eso, esta piedra es ideal en momentos de fragilidad para ayudar a avanzar y tomar las decisiones correctas. Da apoyo e impulsa el crecimiento personal, impulsándonos a superar las pruebas difíciles que se nos presenten.
(Fuente:
https://www.cristalljoia.com/Blog-Cristall/Calaveras-de-minerales)